Cristalizadores
La cristalización por enfriamiento es un proceso clave en la separación y purificación de compuestos, en el cual una solución líquida se enfría gradualmente por debajo de su temperatura de saturación, favoreciendo la formación controlada de cristales sólidos a partir del soluto disuelto. A medida que desciende la temperatura, los iones o moléculas se organizan espontáneamente en una red cristalina estructurada, lo que permite obtener productos de alta pureza.
Para lograr una cristalización eficiente y selectiva, nuestros sistemas incorporan técnicas avanzadas como control preciso de la velocidad de enfriamiento, siembra inducida, agitación optimizada y diseños de recipiente que favorecen la nucleación y el crecimiento uniforme de los cristales.
Ofrecemos soluciones especializadas de cristalización, incluyendo cristalizadores tipo DTB y OSLO, reconocidos por su capacidad para producir sólidos de alta pureza, controlar el tamaño del cristal y optimizar el rendimiento del proceso. Estas tecnologías son ideales para aplicaciones en la industria química, farmacéutica y en la producción de materiales avanzados para baterías de litio.
Los cristalizadores de enfriamiento funcionan según el principio de que al reducir la temperatura de una solución disminuye la solubilidad de las sales disueltas, lo que conduce a la formación de cristales sólidos. Este enfriamiento controlado permite que los compuestos específicos cristalicen eficientemente.
Diseñamos y fabricamos cristalizadores de enfriamiento personalizados para las necesidades específicas de procesamiento en la fabricación de productos químicos, la producción de alimentos, la industria farmacéutica y el refinamiento de materiales para baterías. Cada unidad de cristalización de refrigeración está diseñada para garantizar un control preciso de la temperatura y una alta pureza del producto, según los requisitos de la aplicación. La cristalización por enfriamiento se utiliza para solidificar materiales líquidos mediante la reducción rápida de la temperatura por debajo de su punto de cristalización. Este enfriamiento rápido provoca la solidificación del material sin formar una estructura cristalina bien ordenada, lo que resulta en un estado amorfo o vítreo con una movilidad molecular considerablemente reducida.